Te llega un libro vergonzoso como objeto. Antes lo han visto tus familiares. Creen que te has comprado un libro pornográfico por internet. Te avergüenzas del libro. No lo dejas a la vista. Ves las fotos del interior y te das cuenta que no lo podrás sacar para leerlo por ahí. No vas a querer que la gente se siente a tu lado en el metro y vea que estás leyendo un libro llamado 20 polvos y que tiene fotografías de mujeres y hombres desnudos follando. Entonces lo guardas como un secreto, como un tesoro escondido con una gran verdad en su interior.